Salud y Conaf endurecen fiscalización a firmas forestales por casos de hanta

Actualmente no existe un registro de la cantidad de empresas forestales ni mucho menos del cumplimiento de las medidas de seguridad sanitarias, según lo que contempla el Decreto Supremo 594, que exige la disponibilidad de agua potable, baños químicos, residuos, entre otros.

Luego de la fiscalización que realizó personal de la Autoridad Sanitaria a la empresa forestal Río Pitildeo, en la localidad de Colhue, en Trumao (firma en la que trabajó Bernardo Kremer Bañares, la primera víctima fatal del virus hanta en Osorno este año) donde se constató que no contaba con agua potable, baños químicos y control de vectores, la entidad de la Seremía de Salud, en conjunto con la Corporación Nacional Forestal (Conaf), intensificarán y aunarán las fiscalizaciones a las 16 empresas del rubro en la provincia.

Así lo dio a conocer la jefa (s) de la Autoridad Sanitaria de Osorno, Yohani Wistuba, quien además de aclarar que la empresa forestal Río Pitildeo paralizó sus faenas de manera voluntaria, adelantó que en la reunión de la Mesa Intersectorial de Prevención del Virus Hanta, que se efectuará hoy en dependencias de la entidad en Osorno, invitará a la Conaf y en lo posible a la Inspección del Trabajo, con el fin de realizar un trabajo mancomunado para evitar la proliferación de esta mortal enfermedad.

Actualmente no existe un registro de la cantidad de empresas forestales en la provincia, ni mucho menos del cumplimiento de las medidas de seguridad sanitarias, según lo que contempla el Decreto Supremo 594, que exige condiciones mínimas de seguridad laboral (disponibilidad de agua potable, baños químicos, residuos, entre otros).

Según Wistuba, esta preocupación nace a partir del contagio de virus hanta de Bernardo Kremer, trabajador forestal que presumiblemente se contagió mientras realizaba faenas forestales en el sector de San Juan de la Costa. Un caso que dejó entrever que la Autoridad Sanitaria no cuenta con un registro exacto de las faenas y las condiciones de seguridad e higiene de los trabajadores.

“Uno de los grandes problemas que tenemos es que no hay claridad de la ubicación de los trabajadores forestales, porque generalmente no están más de una semana en el mismo predio. Además de ello, no todas las empresas entregan medidas de protección para evitar el contagio de hanta, a lo que se suma el florecimiento de la quila que hace crecer la concentración de roedores”, sostuvo Wistuba.

Por todo eso, y para evitar un contagio masivo, se hizo necesario realizar un trabajo en conjunto que se espera comience en los próximos meses.

En tanto, Francisco Ibarra, director provincial de la Conaf, indicó que hasta el momento la entidad forestal sólo realiza un trabajo de registro de las faenas. “Hace un tiempo realizamos un trabajo en conjunto con la Autoridad Sanitaria que es necesario actualizar. Pero lo más importante es que todos debemos ser fiscalizadores, tanto los trabajadores como nosotros”, sostuvo.

FUENTE: https://www.lignum.cl/noticias/index.php?id=23609